Aquel barco de papel que navegó por un inmenso rio.
Inmensas fueron sus olas.
Inmenso fue el cielo, testigo,
de aquel pobre barco
que deseaba
llegar a su destino.
Mayor fue su desgracia,
que no llegó.
Porque quedó hundido.
Mayor fue mi sorpresa,
Al descubrir que aquel barco fue construido
con mis suspiros.
Y que el rio donde quedó hundido,
Se formó…
con mis lágrimas.
Al ver que cada una de mis palabras,
Atravesaban el viento, el cielo, el rio…
Para morir en tu oído.
MJ.J.CH
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